Let's start from the very beginning, a very good place to start
Mentiría si digo que recuerdo exactamente lo que sentí al llegar a esta clase el primer día, lo que sí recuerdo es que llegué emocionada, a pesar de la hora porque, así como en el semestre de primavera, los martes y jueves serían días de las clases padres de la carrera. También he de confesar que me sentía un poco intimidada por el nombre de la materia, y porque me habían contado que era una materia súper teórica, difícil y que había que dedicarle mucho tiempo, lo cual resultó ser en parte cierto.
Me costó algo de trabajo leer tanto sobre el español cosas que ya había aprendido del inglés, pero como el español ya está internalizado, nunca me había detenido a pensar en sus pequeñeces, sin embargo lo disfruté, disfruté mucho la parte teórica de la clase (¡shock! ¡Horror!) y el “traducir” el conocimiento al blog, bueno, eso el primer parcial.
El segundo parcial fue otra cosa, fue un constante recordatorio de por qué, teniendo la opción, no quise estudiar literatura, y es que si bien tengo facilidad con la palabra, no me sale la poesía. Lo único que pude hacer “bien” fue el soneto, y eso yo creo que porque tiene reglas muy rígidas y al parecer últimamente me muevo bien en cosas así.
En general creo que de este curso me llevo, además de conocimiento lingüístico que no tengo la menor duda me será de utilidad más adelante en la carrera, o en una conversación casual, ¿por qué no?, me llevo la habilidad de organizar bien mis tiempos. Esto sobre todo porque siempre había algo qué hacer o qué leer y había que estar encima de eso para no atrasarse (que esto no siempre se lograba, jeje).
De igual manera sigo sin dejar atrás mi oralidad a la hora de escribir. Escribo a como se me van ocurriendo las cosas, pero porque estoy hablando de sentimientos e ideas, si de un ensayo se tratara, se escucharía rígido y acartonado, y no queremos eso para nuestra despedida.
Otra de las cosas que hizo esta clase fue ayudar a darme cuenta de todo el cariño que le tengo a la lingüística, y que sí tomé una buena decisión al cambiarme porque me emociona hablar de acentos y la lengua en contexto.
Lo que no me agradó fue tener que recitar en público, ¡tengo el filtro afectivo altísimo! Siempre que tengo que hablar en una clase, recuerdo cuando expuse mi trabajo de adquisición de la primera lengua el semestre pasado, tenía que hablar 9 minutos, pero estaba tan nerviosa que terminé hablando mucho menos tiempo del que debía. Casi me mata la teacher, pero bueno…
Finalmente, gracias al Dr. Sergio por su entusiasmo, en verdad se ha convertido en uno de mis profesores favoritos (esto no lo digo a la ligera, yo soy lo que se denomina “público difícil”). Gracias por tu entusiasmo y el amor que le tienes a la lengua. Gracias por todo.
Y colorín colorado, este cuento se ha acabado.
Und wenn sie nicht gestorben sind, dann leben sie noch heute. (Este es el equivalente a nuestro colorín colorado en alemán, solo que ellos dicen “y si no se murieron, entonces siguen vivos el día de hoy”.)
El título y subtítulo de esta entrada vienen de canciones de The Sound of Music, veánla si no lo han hecho.